Estamos cercanos a cerrar un año que fue muy difícil para el Sector Salud del país, el deterioro de la liquidez, que hace que la cartera alcance valores nunca antes vistos entre las EPS y las IPS y, a su vez, de estas con los proveedores. Esto nos implica tener un pensamiento muy prudente para el año que se inicia. Un año que estará ocupado por la atención sobre el cierre y continuidad del proceso de paz y las elecciones.

Nuestro trabajo en equipo nos permitió sortear las dificultades y cerrar un año de sostenibilidad en lo económico, lleno de muchos logros académicos e investigativos y el alcance de la Acreditación como Hospital Universitario. A todas las personas que desde su rol como empleados, usuarios y estudiantes contribuyeron con estos logros, MUCHAS GRACIAS. Para la celebración en familia que se acerca les invito a reflexionar sobre estas palabras que nos presentó el Padre Santiago Jaramillo Uribe, S. J. en el año 2007:

"La celebración cristiana de la Navidad debe girar en torno a la Novena de Navidad rezada en familia y –ojalá- participando en la celebración diaria de la Eucaristía y comulgando en ella, durante los nueve días de la Novena. La preparación para celebrar la Navidad debe llevarnos a compartir cristianamente con los que no tienen. Para ellos el derroche de dinero que observan es una afrenta. Asimismo –si queremos celebrar cristianamente la Navidad- es indispensable procurar que los regalos –aguinaldos- y las tarjetas de Navidad sean expresión de una participación sincera de nuestro afecto y cariño, que se hace más vivo en este tiempo.

Otro pilar de la celebración de la Navidad es intensificar la vida de familia y en ella dar todo el sentido profundo que tienen el Pesebre, el Árbol de Navidad y la Corona de Adviento. La música durante todo el período de Adviento y Navidad también puede ayudar a fomentar el espíritu cristiano de la Navidad. Por eso, debe ser predominantemente la de los Villancicos que traen un mensaje del Misterio de Navidad.

Oración, vida familiar, alegría, recogimiento, compartir cristianamente, vivir en paz, perdonar a quienes nos hayan ofendido, y vivir el sentido profundo del Pesebre, del Árbol de Navidad y de la Corona de Adviento, son unas columnas para celebrar cristianamente la Navidad. Navidad –recordemos- es fiesta de familia y familiar. Además, ayudar a alguien necesitado espiritual o materialmente, visitar a los enfermos o ancianos, ayudar a una obra de beneficencia, practicar esas obras de caridad, es una excelente forma de celebrar la Navidad".

En esta celebración en familia y como parte de la novena, les invito a recordar algunas frases del Papa durante su visita a Colombia que, si bien eran dirigidas a los jóvenes, son fuente de inspiración para todos en esta reunión familiar:

"¡No le teman al futuro! ¡Atrévanse a soñar a lo grande!". "Mantengan viva la alegría… No se la dejen robar".

"Ayúdennos a nosotros, los mayores, a no acostumbrarnos al dolor y al abandono". "Cuánto los necesita Colombia para ponerse en los zapatos de aquellos que muchas generaciones anteriores no han podido o no han sabido hacerlo, o no atinaron con el modo adecuado para lograr comprender!". "También vuestra juventud los hace capaces de algo muy difícil en la vida: perdonar".

Aun somos la generación del futuro cercano, que nos debemos imponer la obligación de tener una patria más amable y grande para todos.
Un fraterno y cálido abrazo para todos.
¡FELIZ NAVIDAD 2017, MUCHO AMOR, ALEGRÍA Y ÉXITOS EN EL AÑO 2018!