La Primera Asamblea Mundial de la Salud, en 1948, propuso que se estableciera un «Día Mundial de la Salud» para conmemorar la fundación de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y se definió que fuera el 7 de abril.

Todos los años se elige para esa jornada un tema de salud específico a fin de destacar un área prioritaria de interés. Para el Día mundial de la Salud del año 2018, el tema será: Salud para todos con la cobertura sanitaria universal. Ello significa garantizar que todas las personas, en cualquier lugar, puedan tener acceso a servicios de salud esenciales y de calidad sin tener que pasar apuros económicos.

El Director General de la OMS afirma: "Nadie debería tener que elegir entre la muerte y las dificultades económicas. Nadie debería tener que elegir entre comprar medicamentos y comprar alimentos".

La Asamblea General de las Naciones Unidas declaró el 22 de abril como Día Internacional de la Madre Tierra para reconocer la responsabilidad que nos corresponde de promover la armonía con la naturaleza y la Tierra, a fin de alcanzar un justo equilibrio entre las necesidades económicas, sociales y ambientales de las generaciones presentes y futuras. Para el 2018 el lema es: Terminar con la contaminación de los plásticos.

Los avances de la medicina curativa y de los entornos sociales que van controlando las enfermedades infecciosas y contribuyendo al incremento de la expectativa de vida de los seres humanos, en ocasiones convierte a las personas en arrogantes y olvidan que las prácticas de conductas sanas, incluyendo el cuidado de la Casa Común (el planeta), siguen siendo indispensables para el cuidado de la salud y la vida. No tiene sentido descuidar la higiene diaria y el medio ambiente para luego requerir y exigir tratamientos costosos para enfermedades que pueden prevenirse.

Por lo anterior y retomando como base el nuevo concepto que propone el grupo de trabajo del Médico Javeriano Alejandro Jadad, entendiendo la salud como "la capacidad de las personas o de las comunidades para adaptarse, o para autogestionar los desafíos físicos, mentales o sociales que se les presenten en la vida", debemos asumir los nuevos paradigmas de la salud que propongo:

1. Entender que tenemos más y mejores procesos curativos, pero la prevención, incluido el cuidado del medio ambiente, sigue siendo más efectiva que todos ellos.
2. Retomar de manera vigorosa los hábitos de higiene y aseo personal y del entorno, única manera de controlar problemas como el Dengue, el Chicungunya y las enfermedades, por alimentos y contaminación, incluido, el cáncer y las enfermedades respiratorias.
3. Más ejercicio y menos sedentarismo son necesarios para mantener una mejor condición física.
4. Vamos a vivir más años y la calidad de esa vida más larga depende cada vez más de nosotros y menos de los servicios de salud. Por ello, es importante tener un planeta menos contaminado y con mayores fuentes de agua y aire limpio.
5. Como las enfermedades crónicas (cardiovasculares, endocrinológicas, cáncer, entre otras) aumentarán en su frecuencia, en gran parte volvemos a un paradigma clásico cuando ante la imposibilidad de curar es más necesario el cuidar.
6. Exigir un buen sistema de salud y aportar mediante impuestos y cotizaciones cuando se está sano, es la mejor forma de contar con la protección cuando se está enfermo.
7. Escoger bien la EPS y la IPS que nos atienden es una acción de cuidado mínimo en nuestro sistema.